sábado, 31 de agosto de 2013

1964, Borges

Mi poema favorito...



Ya no es mágico el mundo. Te han dejado. 
Ya no compartirás la clara luna 
ni los lentos jardines. Ya no hay una 
luna que no sea espejo del pasado, 

cristal de soledad, sol de agonías. 
Adiós las mutuas manos y las sienes 
que acercaba el amor. Hoy sólo tienes 
la fiel memoria y los desiertos días. 

Nadie pierde (repites vanamente) 
sino lo que no tiene y no ha tenido 
nunca, pero no basta ser valiente 

para aprender el arte del olvido. 
Un símbolo, una rosa, te desgarra 
y te puede matar una guitarra. 

II 

Ya no seré feliz. Tal vez no importa. 
Hay tantas otras cosas en el mundo; 
un instante cualquiera es más profundo 
y diverso que el mar. La vida es corta 

y aunque las horas son tan largas, una 
oscura maravilla nos acecha, 
la muerte, ese otro mar, esa otra flecha 
que nos libra del sol y de la luna 

y del amor. La dicha que me diste 
y me quitaste debe ser borrada; 
lo que era todo tiene que ser nada. 

Sólo que me queda el goce de estar triste, 
esa vana costumbre que me inclina 
al Sur, a cierta puerta, a cierta esquina. 

9 comentarios:

  1. Rossina, todos los poemas amorosos de Borges están aquí en tu blog.

    ResponderEliminar

  2. para mí
    Mis favoritos poemas de Borges (aunque toda su poesía no deja de asombrame), porque cada uno de ellos me ha ayudado a avanzar en mi propia vida y comprender mejor quien soy.

    EL LABERINTO
    poema de Jorge Luis Borges

    Zeus no podría desatar las redes
    de piedra que me cercan. He olvidado
    los hombres que antes fui; sigo el odiado
    camino de monótonas paredes
    que es mi destino. Rectas galerías
    que se curvan en círculos secretos
    al cabo de los años. Parapetos
    que ha agrietado la usura de los días.
    En el pálido polvo he descifrado
    rastros que temo. El aire me ha traído
    en las cóncavas tardes un bramido
    o el eco de un bramido desolador.
    Sé que en la sombra hay Otro, cuya suerte
    es fatigar las largas soledades
    que tejen y destejen este Hades
    y ansiar mi sangre y devorar mi muerte.
    Nos buscamos los dos. Ojala fuera
    éste el último día de la espera.

    El amenazado

    Es el amor. Tendré que cultarme o que huir.
    Crecen los muros de su cárcel, como en un sueño atroz.
    La hermosa máscara ha cambiado, pero como siempre es la única.
    ¿De qué me servirán mis talismanes: el ejercicio de las letras,
    la vaga erudición, el aprendizaje de las palabras que usó el áspero Norte para cantar sus mares y sus espadas,
    la serena amistad, las galerías de la biblioteca, las cosas comunes,
    los hábitos, el joven amor de mi madre, la sombra militar de mis muertos, la noche intemporal, el sabor del sueño?
    Estar contigo o no estar contigo es la medida de mi tiempo.
    Ya el cántaro se quiebra sobre la fuente, ya el hombre se
    levanta a la voz del ave, ya se han oscurecido los que miran por las ventanas, pero la sombra no ha traído la paz.
    Es, ya lo sé, el amor: la ansiedad y el alivio de oír tu voz, la espera y la memoria, el horror de vivir en lo sucesivo.
    Es el amor con sus mitologías, con sus pequeñas magias inútiles.
    Hay una esquina por la que no me atrevo a pasar.
    Ya los ejércitos me cercan, las hordas.
    (Esta habitación es irreal; ella no la ha visto.)
    El nombre de una mujer me delata.
    Me duele una mujer en todo el cuerpo.

    El advertido

    He cometido el peor de los pecados
    que un hombre puede cometer. No he sido
    feliz. Que los glaciares del olvido
    me arrastren y me pierdan, despiadados.

    Mis padres me engendraron para el juego
    arriesgado y hermoso de la vida,
    para la tierra, el agua, el aire, el fuego.
    Los defraudé. No fui feliz. Cumplida

    no fue su joven voluntad. Mi mente
    se aplicó a las simétricas porfías
    del arte, que entreteje naderías.

    Me legaron valor. No fui valiente.
    No me abandona. Siempre está a mi lado
    La sombra de haber sido un desdichado.

    bueno, podria llenar este correo con su poesia y no es la idea, solo quiero mencionar: Ajedrez, el Golem, Borges y yo, fundacion mitica de buenos aires, etc etc etc...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. "Mi mente se aplicó a las simetías del arte, que entreteje naderías..."

      Hay una claridad en Borges extraordinaria, el piensa por el y por todos nosotros, que vemos que la construcción literaria parece un tiempo perdido. Sin embargo... allí reside toda felicidad verdadera.

      Eliminar
  3. Rescato : Una maravilla nos acecha
    Un instante , cualquiera es mas profundo...

    Borges, Borges basta ser valiente para volver a empezar
    Rossina Gracias por estar.
    Hacelo mas asiduamente extraño tus elecciones Silvia

    ResponderEliminar
  4. "Sólo que me queda el goce de estar triste,
    esa vana costumbre que me inclina
    al Sur, a cierta puerta, a cierta esquina."
    Creo que no hay duda que esos versos nacieron de su pluma. Suenan como una firma!
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  5. Rescato "ya no seré feliz. Tal vez no importa".
    Por alguna razón, lo siento como propio. Como sentí propio hacerme conocer como "demiurgo".

    ResponderEliminar
  6. gracias, Piba.
    me dan ganas de conversar con vos.
    tal vez, un día de éstos...

    mientras, un abrazo

    ResponderEliminar
  7. Gracias a todos por los hermosos comentarios.

    ResponderEliminar
  8. A mi cada vez me resulta más difícil hablar de Borges, ya casi no puedo, ya se sabe, la emoción y esas cosas, entran reparos de comentarlo, yo no se cual prefiero, pero este podría perfectamente ser uno de ellos.

    ResponderEliminar