El Filósofo Fernando Savater presentó en Buenos Aires sus dos últimos libros
En un encuentro auspiciado por Revista
Ñ y Editorial Espasa, el 25 de
octubre pasado, Fernando Savater llegó a Argentina con el propósito de
presentar sus dos últimos libros: la novela Los
invitados de la princesa y el ensayo Ética
de urgencia. El lugar elegido fue Daín
Usina Cultural, en la esquina del Palermo borgeano, Thames y Nicaragua. Tuvimos la ocasión de estar ahí donde
el semiólogo Eliseo Verón dialogó con él y el público durante algo más de
sesenta minutos.
Eliseo: Este señor es impresentable. No sólo porque es bastante
más joven que yo sino porque ha publicado más o menos unos sesenta libros
(debería estar prohibido eso).
A mí particularmente me ha servido leerlo yendo desde la no
ficción a la ficción, para poder entender su
ironía"_ y agregará al cierre del encuentro: es peligroso,
porque detrás de la apariencia de una literatura simple y transparente, los
libros de Savater revientan la cabeza, y esa es la definición de un buen
libro.
Voy a empezar por Ética de urgencia, una configuración de tres: poder,
responsabilidad y confianza, que engrosa, como un segundo largo capítulo, tu ya
clásico "Ética para Amador", de 1991.
Su nuevo ensayo filosófico,
reflexiona sobre las continuidades que se han producido en los veinte años que
pasaron desde la publicación. Así discutieron ambos interlocutores refiriéndose
ampliamente a la crisis europea y principalmente a España.
Savater: Entendamos que no es una actitud solo europea, sino que
nace con la especulación de EE.UU.
Primero que nada, la democracia no representa a nadie. La democracia no
es verdadera desde Atenas. El libro "El anónimo ateniense", nos dice
que todo es falso, que los votos están comprados. Todos los tópicos de hoy
estaban ya…
La democracia exige una acción constante de todos los ciudadanos. En
cambio vivimos en sociedades que pagan para dejar de tener preocupaciones.
Pagamos a la escuela, para no preocuparnos por los hijos, pagamos a los políticos, para dejar de ser
ciudadanos. Los hemos mandado a mandar y no los acompañamos, agrega.
Yo no entiendo de economía, pero tengo esa sospecha. Creo que muchos
deberían enfadarse consigo mismos por no haber sido políticos.
Hoy se vive a crédito. Todo es virtual.
Antes te decían "Jugate todo lo que tengas, pero ¡solo lo que tengas!
Antes te decían "Jugate todo lo que tengas, pero ¡solo lo que tengas!
Los temas para Ética de urgencia, los propusieron los
jóvenes; un libro más hablado que escrito: se trata del resultado de sus
conversaciones con los alumnos de las universidades de Zaragoza y Madrid. Habían
pasado veinte años de la publicación de Ética
para Amador y la editorial buscaba una suerte de homenaje.
Temas que inquietaran a esos
jóvenes, como la democracia, la idea de Dios, la no regulación de internet
entre otros.
Savater: Me repugnan esos viejos que solo le dan la razón a los
jóvenes. Yo discutía, yo les llevaba la contraria. Pasaron muchas cosas en
estos veinte años. En el medio ocurrió Internet. Esto fue una diferencia
fundamental. "Ética para Amador" fue el primer libro que escribí en
un ordenador. Es un mundo irregular, donde no hay reglas y es donde más se debe
exigir la ley; no hay policías cobrando multas.
-Me enamoré de una frase suya: "que el futuro de un país se juega
en las aulas", manifiesta
el Intendente de Saladillo, Carlos Antonio Gorosito.
Savater: Yo no digo que la educación resuelva todos los
problemas, pero en cada solución hay algo de educación. El problema de la
educación es que el tiempo de los políticos en ejercicio es muy diferente a los
tiempos de los educandos. No hay político que piense y que vea las cosas a
quince años, sino a quince meses.
La buena educación es cara, exige dinero, pero la mala educación la
pagan los países mucho más cara.
La misión de la universidad no es la de formar empleados y sí
universitarios. En su ocio, una serie de personas se apartaban para
transformarse y formarse. Eso era la universidad. Si la erudición fuese solo
acumulación de conocimiento, la máquina lo hace mejor. ¡Recuerden siempre! (Interpela)
"yo no soy la creación de nadie, nadie me fabrica".
En medio de la charla, que en
algunos momentos se tornó debate, cuando surgieron temas como la ley de aborto
no punible, declara: "Las leyes no
están para resolver problemas morales, sino para que distintas morales, puedan convivir sin que alguien sea convertido en un
delincuente. La sociedad no necesita caudillos, en todo caso líderes, y si no
liderazgos comunes. Que sean hijos queridos por los padres, al menos por los
padres"
Savater: observamos el mundo como espectadores. Vemos la sociedad como
un espectáculo. ¿Y usted, cuándo sube al escenario, usted? Los tomates sólo se
reciben en el escenario"…
Casi al cierre de la charla, nos
recomienda leer "Ayer nomás", que
según su palabra, no habla de "lo que se puede y debe", sino de "lo
que se debe y no se puede hacer". Porque
el pasado no se resuelve nunca, y la verdadera regla de cortesía es no decir
jamás "yo lo dije antes"…
Se despide del público
sintetizándose…
"Ando
cada vez más errante. Soy un viajante de comercio de mi mismo. Todo lo que hice
lo hice para comprar libros. A mí lo que me gusta es leer. Escribo muchas
veces, pero poco; todos los días."
Qué maravilla Savater, un hombre al que he admirado muchísimo desde siempre y veo que ha sido un encuentro cercano y plagado de frases que hacen reflexionar, fiel a su costumbre.
ResponderEliminarGracias por compartirlo
Esos son tipos por los que vale la pena perder el tiempo, o trabajar, que es lo segundo lo que me parece le ha llevado a su convocatoria. Y me alegro por usté. Y aunque se esté de acuerdo o no, vale la pena. Sí señor. Besos y gracias por compartirlo.
ResponderEliminarLo único que leí de Savater fue el prólogo que escribió para el libro de A. E. Van Vogt, 'El viaje del Beagle Espacial', y sólo porque me topé con él...
ResponderEliminarSaludos
J.
No lei nada a Savater todavía, está pendiente, lo que le oí decir son opiniones bastante sensatas. Lo de la educación no me parece una idea manida: las desgracias de este pais me parecen consecuencias lógicas de una población (con muchas excepciones, claro) que desprecia sistemáticamente la literatura, la democracia, el arte, la ciencia, la filosofía, el respeto por los otros y por lo "otro", el sentido común y el resto de cosas supuestamente inútiles y que sin embargo son fundamentales en estos tiempos; una educación que no es solo problema de un sistema educativo eficiente, sino que todos deberíamos ser copartícipes en ella...ufff vaya "discurso" que me ha salido, con lo poco que me gustan estas cosas...pero es que estoy enfermo y con fiebre...
ResponderEliminarMe encantó, luego haré los comentarios.
ResponderEliminarSaludos y disculpas por la demora en la respuesta, es que nunca supe de estos correos.
Ariel
Ro, la revista hoy ya en papel y este blog es todo lo profundo y lo excelente que suponía podías llegar a hacer!
ResponderEliminarTe felicito, lo que digan los mediocres... bullshit o sea: mierda!!
que te pongan el numero que quieran, que opinen lo que quieran , vos debes sentirte orgullosa de haber parido esto, es bello sin par!
abrazo,
"La democracia exige una acción constante de todos los ciudadanos. " muy interesante el articulo y muy impactante tambien, los felicito por el blog realmente no tiene desperdicio,
ResponderEliminarSaludos